Camilo, Lina y Kevin eran inseparables desde la universidad. Aunque cada uno vivía en una ciudad diferente (Camilo en Medellín, Lina en Bogotá y Kevin en Cali), mantenían la tradición de reunirse una vez al año para hacer un roadtrip de esos que terminan con playlists eternas, fotos borrosas y mil historias para contar.
Este año, el destino elegido era el Parque Nacional del Café. ¿El plan? Reunirse cada uno por su cuenta, rodar hasta el punto de encuentro, y luego, juntos, conquistar las montañas cafeteras a bordo de "la consentida", el carro de Camilo, una van pintoresca con alma propia y muchos kilómetros encima.
Todo iba bien, hasta que llegó el chat grupal de WhatsApp.
Grupo: Trip Cafetero
Kevin: Oigan... ¿Ya revisaron el SOAT?
Lina: